viernes, 21 de noviembre de 2014

LAS MÁQUINAS DE COSER, por Inés Dolz

La máquina de coser de mi abuela:
Es una máquina de la marca “Sigma”, el modelo A, que la compraron en 1956.
Funcionamiento: La máquina se pone en funcionamiento con una rueda, situada a mano derecha, que está conectada con un eje. Este eje hace que la aguja con el hilo baje y suba. El pedal lo que hace es continuar el movimiento del eje sin necesidad de estar dando vueltas a la rueda.
En aquella época 3.280 pesetas en una máquina de coser era toda una inversión para una familia que vivía en una masada de pueblo. El padre de mi abuela, tuvo que vender una cría de cerdos para conseguir el dinero. La máquina la encargaron en la tienda del pueblo, y se la trajeron desde Teruel. Era la más nueva y moderna que había.
Posición de la máquina en esa época: Cada vez era más corriente que las chicas de su edad (mi abuela entonces tenía 18 años) tuvieran máquina de coser y por eso en el pueblo había una mujer que enseñaba a utilizarla. 
La máquina de coser de mi madre:
Es de la marca “Sigma”, el modelo 2000, que se diseñó en el 1979.
Funcionamiento: Motor eléctrico que mueve un sistema de levas y brazos que consiguen que una aguja enhebrada en un hilo atraviese tejidos con formas y ritmos diferentes.

Evolución: (De las de pedal a las eléctricas)
Según el funcionamiento: Las eléctricas, como la de mi madre, las enchufamos a la corriente y pisamos un pedal conectado a un cable para hacerlas funcionar. No necesitamos la fuerza bruta de nuestras piernas, como en las de pedal antigüas. 
Según las marcas: Sigma es una marca española que lleva más de 100 años en el mercado, pero en la actualidad la fabricación de sus máquinas ha pasado a empresas de Hong Kong, compañías de baja calidad.
Evolución: (De las eléctricas a las electrónicas)
Las máquinas más modernas son las electrónicas, en las que la selección de puntadas, así como la regulación de ancho y largo de puntada se hace mediante botones, en lugar de ruletas como en las eléctricas. Y ahora, la mayoría de las electrónicas disponen de una pantalla led para mostrar el tipo de puntada y las variables seleccionadas. Una máquina electrónica siempre tendrá mejor calidad de costura que una mecánica. Las puntadas están controladas electrónicamente y el motor es mucho más fino y preciso.
Las electrónicas también tienen más variedad de puntadas y el sistema de medida del tamaño del ojal es automático gracias al ‘prensatelas’ especial que mide el tamaño del botón.

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